lunes, 19 de noviembre de 2012

Mr Photographer.




Aún recuerdo sin esfuerzo la noche de verano que te conocí. En un bar de no más de 5 metros cuadrados en Malasaña, supe que serías alguien especial desde que te vi. Yo hablaba y reía con mis amigas, tú bebías una copa de ron. Mis miradas perdidas buscaban encontrar tu atención. Tú te acercaste a la barra, aún no sé muy bien por qué. Me rozaste al pasar y al darte la vuelta, te saludé. Te pregunté tu nombre, tú el mío, luego la edad, y dejamos que actuara el destino como si fuese casualidad. Típica historia de "chica conoce chico", pero tú eras tan atípico. Maduro, independiente, interesante, artístico. Divertido, algo ambigüo, inteligente, casi místico. REcuerdo los paseos por Madrid, de Moncloa a tu piso. Tantos planes que sugerir, pero el destino no quiso. Cambiamos esas "copas y conciertos" por noches en tu habitación. Noches en las que nuestra ropa interior acababa tirada en cualquier rincón. La televisión apagada, los ceniceros llenos y lo único que se oía eran mis gemidos y tu respiración. Y nunca fui princesa de primera cita y revolcón, pero había algo en ti que despertaba mi pasión y volvía loca a mi razón. Tantas noches de humo y placer, de dormirnos desnudos en tu cama, de sensaciones que me hacían enloquecer y mandando a la mierda mi mala fama. Y ahora tú te vuelves a Nueva York y me dejas aquí sola. La soledad me consume y la lujuria me controla. Pero si vuelves no dudes en llamarme, que a una noche contigo jamás podré negarme.

M.

Sunday Drivers - Often

Have you forgotten the way you looked at me when me met?